Fuencactiva 2008

Esta edición de fuencactiva, que tuvo lugar en el mes de junio, fué boicoteada por la Junta de Distrito, que nos denegó la solicitud para hacerla ese año nuevamente en el CC Vaguada y en el Parque de la Vaguada.

De esta manera, las actividades se convirtieron en reivindicaciones, y celebramos una concentración en el anfiteatro de la Plaza Corcubión, donde se leyó el siguiente comunicado:


Definir fuencActiva no es fácil. Podemos decir lo que no es, lo que no quiere ser. No es ni quiere ser una feria de asociaciones, entendida como un escaparate al público, tampoco quiere ser una muestra, una simple exposición de lo que hacemos las asociaciones y, desde luego, lo que no queremos que sea es un producto más en la fabricación estándar de ferias distritales al uso organizadas bajo el manto del Ayuntamiento (no importa de qué color sea).

A nosotros nos gustaría que fuencActiva fuese algo así como un espacio para intercambiar ciudadanía, es decir, un espacio en el que pudiese caber el debate, la reflexión, el interés por lo que pasa en el distrito y en otros barrios y mundos, la curiosidad por lo que hacen unos y otras, ya seamos asociaciones, colectivos sin papeles o plataformas, el compromiso con aquello con lo que nos identificamos, el apoyo activo a aquello que nos convence, el intercambio de capacidades, el trueque…, todo ello en un formato flexible, lúdico, cercano, nuestro.

De momento le llamamos encuentro de asociaciones y entidades del distrito, porque lo que buscamos es precisamente un espacio donde asociaciones y colectivos nos encontremos entre nosotros y con los vecinos y vecinas que se acercan.

Ello no quiere decir que desestimemos la colaboración del Ayuntamiento en la organización de este espacio. Creemos que la colaboración institucional en este tipo de actividades ciudadanas es importante, siempre que se realice con el consenso de todas las partes, de manera horizontal, amplia y no excluyente.

En esta ocasión, sin embargo, el Ayuntamiento, la Junta de distrito, no solo no ha querido colaborar nuevamente (llevamos desde hace tres años oyéndole decir que lo va a hacer), sino que ha puesto todas las trabas posibles.

Tras denegar el permiso para el fin de semana lúdico en el Parque de la Vaguada, volvió a denegar el permiso para celebrarlo en esta plaza que llamamos del Anfiteatro. En esta ocasión, sin embargo, la denegación del permiso solicitado únicamente se apoya en el “carácter discrecional” de la autorización, por lo que al no fundamentar dicho carácter en ningún otro argumento convierte la discrecionalidad en arbitrariedad, como se deduce de la jurisprudencia del Tribunal Constitucional: “la simple referencia al carácter discrecional de la decisión del órgano judicial no constituye motivación suficiente del ejercicio de dicha facultad” (STC 320/2006, de 15 de noviembre de 2006), que creemos es perfectamente aplicable a la situación que nos ocupa. Igualmente “la exigencia de una motivación adecuada y suficiente constituye una garantía esencial para el justiciable mediante la cual es posible comprobar que la decisión judicial, en cuanto fruto de una interpretación y aplicación del Ordenamiento jurídico reconocible, es consecuencia de su aplicación razonada y no el fruto de la arbitrariedad (STC 119/2003, de 16 de junio, FJ 3).


Pero además, el Ayuntamiento de Madrid, a través del Reglamento de Participación, fija, entre otros objetivos, el de “fomentar la vida asociativa en la ciudad, en sus distritos y en sus barrios, garantizando la convivencia solidaria y equilibrada y en la libre concurrencia de iniciativas ciudadanas sobre los asuntos públicos”. A tal fin, el Ayuntamiento permite a las entidades ciudadanas declaradas de utilidad pública municipal el acceso al uso de locales e instalaciones de titularidad municipal para la realización de actividades puntuales, manifestando que “la denegación, en su caso, habrá de ser motivada” (artº 49 ROPC).

El hecho de que “la vía pública esté destinada al uso o servicio público” no implica que los poderes públicos tengan que autorizar individualmente a cada ciudadano “particular” para ejercer ese derecho considerando dicha autorización como una excepcionalidad al uso público del mismo. Por consiguiente, los espacios públicos son para uso y disfrute de todos los ciudadanos sin excepción, debiendo ser regulados por la autoridad competente solamente cuando exista un conflicto de intereses, por ejemplo, que exista más de un colectivo particular que desee utilizarlos simultáneamente.

El Ayuntamiento no puede patrimonializar lo que es de todos los ciudadanos, pues de lo contrario se está produciendo un abuso de poder. Y esto, desgraciadamente, es algo que está pasando también en otros distritos, y se enmarca en la política de privatización de lo público que tanto el Ayuntamiento como la Comunidad de Madrid vienen impulsando desde hace tiempo. Recordemos que la gestión de los equipamientos y muchos servicios municipales (centros deportivos, centros culturales, etc…) están privatizados, que el suelo público para centros escolares se le está “regalando” a empresas privadas para construir sus colegios, y que los hospitales y servicios de salud están pasando a manos privadas a pasos agigantados.  QUÉ VENDRÁ DESPUÉS?

Pero no podemos esperar a averiguarlo, porque entonces puede ser ya muy tarde.

Por eso, porque no estamos dispuestos a permitir ningún abuso más de poder, nos hemos reunido hoy aquí, y lo haremos todas las veces que sean necesarias hasta que nos oiga la Concejala de este distrito, y el Alcalde también, para reivindicar el derecho al uso y disfrute de los espacios públicos por parte de los vecinos de manera colectiva, participativa y solidaria.

Recuperemos la palabra, recuperemos las calles. Es nuestro derecho.


Anfiteatro de Redondela, 7 de junio de 2008